La Meditación es la mejor herramienta para poder relajar y soltar las tensiones mentales que tanto nos afectan, meditar es concentrarse de manera prolongada en el tiempo en lo que definimos como un objeto meditativo, este por lo general suele ser una Pranayama en concreto o un mantra; en esta concentración, donde nuestra atención intenta alinearse con el presente, es muy importante que no haya tensión. Es decir hay días donde la mente está más activa y cuesta más llegar a espacios de silencio y de paz y no por ello la técnica meditativa no es efectiva, sino que esos días también se presta atención a toda la dispersión y se generan mecanismos de aceptación de la realidad de cada momento. Así, comienza a decaer la lucha entre como queremos que sucedan las cosas y como realmente están ocurriendo.
Muchas veces el proceso meditativo no es agradable, en su finalidad siempre te va a conducir a espacios de serenidad y de paz bien profundos, pero para conseguirlos habrá que ir soltando todas las tendencias que nos mantienen anclados a patrones de sufrimiento, tendencias subconscientes que, durante muchos años, nos han hecho comportarnos de una manera que no es saludable para nosotros. Entonces, el proceso de meditar se convierte en un proceso diario de higiene mental, donde cada día, nos preocupamos de mantener el espacio mental limpio y fresco, sin tanta carga o sin un movimiento tan revolucionado, más bien, vamos despejando el camino cada día, en cada práctica, con cada concentración relajada en el aquí y el ahora, con las herramientas que se nos proporcionen en cada sesión.
Meditar es esencial en cada etapa de la vida, no tiene nada que ver con la edad, no hay niveles, solo hay presencia y tu práctica de cada día donde te puedes ir redescubriendo a nivel profundo, donde el acceso a la conexión con tu ser se da de manera natural, por lo que tienes que tener paciencia, no te pongas fecha de llegada a ningún lugar, mantén tu mente lo más despejada posible, para que tu silencio sea la constante en cada reto que te plantee la vida.
Así que cuando busques una respuesta Medita, Medita, Medita y cuando no la busques…Medita, Medita, Medita.